Un pvdc-vbac y los protocolos







"La asistencia a una mujer de parto después de una cesárea previa en el segmento inferior debería diferir muy poco de la de cualquier mujer de parto" .

A pesar de la evidencia que apoya la seguridad y conveniencia del PVDC (parto vaginal después de cesárea), las madres que han sufrido una o más cesáreas son llevadas a pensar frecuentemente que el PVDC es una opción arriesgada que bien puede convertirse en peligrosa, especialmente para el bebé.
Esta impresión se enfatiza aún más por los "protocolos hospitalarios", que dictan el "manejo" de la mujer que está de parto tras una cesárea previa.
Dichos protocolos varían en contenido y flexibilidad de un hospital a otro y de un especialista a otro. Cada matrona varía también enormemente en cuán estrictamente se adhiere su ejercicio a los protocolos de su unidad.

Los protocolos para el manejo de PVDC,s, o "pruebas de cicatriz", o "pruebas de parto" (expresiones que algunos hospitales persisten en usar) a menudo incluyen algunos o todos los apartados siguientes: 

• No inducción. Es habitual no inducir a las madres PVDC que están cumplidas. 
• Ingreso temprano. A menudo se dice a las madres que acudan al hospital en cuanto comience el parto. 
• Monitorización electrónica fetal continua. 
• Poner un gotero intravenoso o al menos una vía, de forma que se pueda administras un gotero rápidamente si es necesario. 
• Limitación de la duración de la primera fase del parto. 
• Limitación de la duración de la segunda fase del parto. A excepción de "no inducción", no parece que haya evidencia probada que muestre que el uso de dichas medidas sea beneficioso para las madres o los bebés, y hay razones de peso de que para la mayoría de las mujeres y de los bebés dichas restricciones del curso natural del parto van en su detrimento.



Tu Doula,
@samanthavelezdoula